8 de febrero de 2018

Soy una Freak

Reconócelo. 

A nadie excepto a ti le interesan una mierda tus esfuerzos para llevar adelante ese micro-proyecto en Internet que tanto te ilusiona. 

Piénsalo bien.

Todos andan por la calle con esa cara de "estoy ocupado leyendo a Hemingway" y algunos parece, en serio que lo parece, que de verdad estuvieron indexando la biblioteca de Babilonia en una de sus pasadas encarnaciones, lo cual está claro que les costó demasiado como para que después se la quemasen... lo cual les ha generado un karma inverso que se manifiesta en un "pa qué" constante.

Ni siquiera nosotros leemos ya, porque invertimos nuestro tiempo en ese proyecto que tanto nos emociona, y claro...

En fin, como todo tiene su lado bueno, creo que entre todos hemos conseguido desarrollar el gen de "lectura rápida" en menos de una generación. Sí, ha mutado y ahora todos sabemos lo que pone en cualquier parte tan solo leyendo el titular, o cualquier página en diagonal, lo cual es claramente desventajoso para los fabricantes de gafas. 

Es bonito, mirado así.

De modo que los que dedicamos tiempo y esfuerzo a fabricar palabras encadenadas de un modo que leídas en diagonal suenan aberrantes, somos unos freaks de cuidado. 

Bueno, tú no, claro. 
Bueno, yo sí, oye. 
(¡...!)
Léeme en diagonal. 

A pesar de mi fastidio de freak, en serio pienso que no es culpa de nadie... o lo sería de todos a un tiempo, lo cual viene a ser lo mismo. Pero hay una cosita que me molesta, de la fiebre computacional de estos últimos años. 

Y es que de verdad, piénsalo: Si a nadie le importa una mierda lo tuyo, ¿a qué viene tanta obsesión con conseguir followers, o menctions, o lo que narices te dé por buscar?

Lo que yo he venido comprobando es que eso te quita muchísimo tiempo que podrías dedicar a tus fabulosísimas y nunca suficientemente bien ponderadas freakadas. Que además esa actividad frenética acaba inundando todos tus buzones (y tus pensamientos, si a eso vamos) de spam y que al final, quienes sacan tajada de eso no son los freaks como tú y como yo, sino los anunciantes que se benefician de todo ese tráfico de algún modo.

Digo de algún modo, porque algún día se darán cuenta que es mejor calidad que cantidad. Y que no van a vender más yogures por pasárnoslos más veces por las narices.  

Pues lo mismo ocurre con tus followers. Piénsalo. Si tienes mil seguidores tan solo cinco interactúan con asiduidad en tu página. Y a veces, demasiadas veces, lo hacen desde el topicazo aquél que se creó el único día que interactuaron contigo de verdad.

No te enfades, ponte en su lugar. Ellos también tienen demasiada información, demasiado donde escoger. 

Para que la calidad se imponga a la cantidad, más que una carretera llena de coches, se necesita un tranquilo paseo por el parque. 

Para todo lo demás, Mastercard.

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